Comentario previo:
Hacer un pan con algas es algo que no se me habría ocurrido hasta hace muy poco. Con esto de andar metido en la cocina con algas ando siempre buscando recetas y elaboraciones que contengan este ingrediente. Así fue como di con la receta de unos panecillos de wakame en el blog Va de pan que, como su nombre indica, contiene cantidad de preparaciones de diferentes panes y otras recetas con harina.
A partir de la receta original yo he hecho mis propias adaptaciones. Parte de la harina de fuerza la he cambiado por otra de centeno, le puse un poquito de azúcar (para un mejor fermento y pensando en compensar la salinidad de las algas) y el trabajo duro de amasar se lo he dejado a la Thermomix (TMx). Por supuesto, el amasado se puede hacer a mano y no creo que haya que explicar cómo hacerlo.
A la hora de elaborarlo pensé que iba a tener un fuerte sabor a algas (una vez hidratas éstas suponían unos 50 g.). Pero en el resultado final se aprecian como un sabor final y domina plenamente el sabor a pan. Yo deje las algas muy trituradas (es un efecto del proceso de mezclado en la TMx), pero podrían quedar más enteras y preservarían más su sabor en aquellos bocados con un trozo de alga.
El aspecto del pan es curioso, ya que éste se vuelve un tanto verdoso (Alicia se reía haciéndome la broma de que se estaba enmoheciendo). La textura quedó esponjosa en la miga (quizá un tanto gomosa por el ligero efecto gelificante del alga), con una cubierta crujiente. Un pan muy bueno para hacer tostadas o para sopar.
A partir de la receta original yo he hecho mis propias adaptaciones. Parte de la harina de fuerza la he cambiado por otra de centeno, le puse un poquito de azúcar (para un mejor fermento y pensando en compensar la salinidad de las algas) y el trabajo duro de amasar se lo he dejado a la Thermomix (TMx). Por supuesto, el amasado se puede hacer a mano y no creo que haya que explicar cómo hacerlo.
A la hora de elaborarlo pensé que iba a tener un fuerte sabor a algas (una vez hidratas éstas suponían unos 50 g.). Pero en el resultado final se aprecian como un sabor final y domina plenamente el sabor a pan. Yo deje las algas muy trituradas (es un efecto del proceso de mezclado en la TMx), pero podrían quedar más enteras y preservarían más su sabor en aquellos bocados con un trozo de alga.
El aspecto del pan es curioso, ya que éste se vuelve un tanto verdoso (Alicia se reía haciéndome la broma de que se estaba enmoheciendo). La textura quedó esponjosa en la miga (quizá un tanto gomosa por el ligero efecto gelificante del alga), con una cubierta crujiente. Un pan muy bueno para hacer tostadas o para sopar.
Ingredientes:
- 5 g. de algas wakame secas.
- 200 g. de harina de trigo de fuerza.
- 50 g. de harina de centeno.
- 150 ml. de agua filtrada tibia.
- 5,5 g. de levadura de panadero seca.
- 1/2 c/c (cucharita de café) de sal.
- 1/2 c/c de azúcar.
Pasos:
- Hidratar las algas siguiendo las instrucciones del envase (en mi caso las hidrate durante 15 minutos en agua salada).
- Poner todos los ingredientes (incluyendo las algas bien escurridas) en el vaso de la TMx. Mezclar: velocidad 6, 15 segundos. Amasar: vaso cerrado velocidad espiga, 10 minutos.
- Sacar la masa y hacer una bola con ella. Dejaremos reposar durante una hora para que la masa fermente y doble su tamaño.
- Sacar el aire de la masa y dar la forma que queramos. Cubrir con una capita de harina y volver a dejar reposar 1 hora.
- Con el horno caliente a 250º, hacer unos cortes en la superficie de la masa y cocer en el horno (calor abajo) durante 20 minutos. Yo utilicé mi nueva piedra de horno y puse unos recipientes con agua en el suelo de horno para que se formara vapor dentro (esto hace que la cubierta quede más crujiente).
Esta vez sí puse el pan directamente sobre la piedra de horno. |