Ojalá que llueva café en el campo
peinar un alto cerro de trigo y mapuey
bajar por la colina de arroz graneado
y continuar el arado con tu querer.
"Ojalá que llueva café" Juan Luís Guerra
Comentario previo:
Lo del "arroz graneado" lo había oído en la famosa canción de Juan Luís Guerra y pensaba que era una forma de adjetivar al arroz, pero no un plato específico o, más bien, una forma de cocinar el arroz para que quede suelto y sabroso. Eugenio, de "La cocina delokos", hace unos días compartió hace unos días el paso a paso de cómo llevar a cabo esta preparación y yo me he dispuesto a hacerla para ver que tal me salía.
En esta receta se utiliza menos agua de la que es usual. Como la fórmula de cálculo era un poco peculiar (meter el dedo y, tocando el arroz, que nos cubra la primera falange), yo he calculado la cantidad de agua, en mililitros, que se usa en tal operación. En cualquier caso, creo que lo importante es las dos fases en que se cuece el arroz: primero con el agua hirviendo y después tapando y dejando reposar. Algo que recuerda al método japonés de cocción del arroz, pero sin el lavado previo de los granos y añadiendo un salteado en aceite aromatizado.
Este detalle de aromatizar el aceite es algo que he visto como importate en el proceso de elaboración de este arroz. Yo traigo aquí uno sencillo en el que sólo participa el ajo como elemento aromatizador. Pero he visto receta donde se usan cebolla, pimientos, chiles, etc. La cuestión es que el aceite impregne de algún aroma los granos de arroz y estos se cuezan hasta absorber la última gota del aceite perfumado.
Este arroz se usa como guarnición para acompañar a otras preparaciones, aunque estando tan sabroso tampoco es extraño ver que se come sólo.
En esta receta se utiliza menos agua de la que es usual. Como la fórmula de cálculo era un poco peculiar (meter el dedo y, tocando el arroz, que nos cubra la primera falange), yo he calculado la cantidad de agua, en mililitros, que se usa en tal operación. En cualquier caso, creo que lo importante es las dos fases en que se cuece el arroz: primero con el agua hirviendo y después tapando y dejando reposar. Algo que recuerda al método japonés de cocción del arroz, pero sin el lavado previo de los granos y añadiendo un salteado en aceite aromatizado.
Este detalle de aromatizar el aceite es algo que he visto como importate en el proceso de elaboración de este arroz. Yo traigo aquí uno sencillo en el que sólo participa el ajo como elemento aromatizador. Pero he visto receta donde se usan cebolla, pimientos, chiles, etc. La cuestión es que el aceite impregne de algún aroma los granos de arroz y estos se cuezan hasta absorber la última gota del aceite perfumado.
Este arroz se usa como guarnición para acompañar a otras preparaciones, aunque estando tan sabroso tampoco es extraño ver que se come sólo.
Ingredientes (para 4 raciones):
- 300 g. de arroz redondo (mejor si es tipo bomba).
- 3 dientes de ajo.
- 20 ml. de AOVE (aceite de oliva virgen extra).
- 250 ml. de agua filtrada o mineral.
- Sal marina
NOTA.- Me han preguntado por qué suelo poner lo de agua filtrada o mineral. El motivo es que vivo en Murcia y la sabor del agua del grifo es muy malo y se transmite a las preparaciones culinarias. Si vives en una zona (como Madrid) donde se dispone de un agua que no transmite sabores desagradables, puedes usar agua del grifo sin ningún problema.
Pasos:
- Picar los dientes de ajo y sofreírlos en una olla (de unos 16 cm. de diámetro de fondo), con el AOVE caliente, hasta que comiencen a dorarse.
- Verter el arroz, salar y saltearlo, removiendo continuamente, durante 2 ó 3 minutos hasta que vemos los granos trasparentes e, incluso, algo doraditos algunos.
- Añadir el agua, que debe cubrir el arroz de manera que si ponemos la punta de nuestro dedo sobre el arroz nos tapará el agua la primera falange (creo que este truco sirve para estas cantidades y yo me fiaría más de proporciones).
- Llevar a hervor el agua y dejar así durante 5 ó 6 minutos, momento el que el arroz quedará al descubierto y se formarán hoyitos en la superficie.
- Tapar la olla (mejor si ponemos un papel de aluminio bajo la tapa para que no se pierda nada de vapor) y bajar al mínimo el fuego. Dejar durante 12 a 15 minutos para que termine la cocción. A esta temperatura no hay peligro de que se nos queme el arroz, aunque lo dejemos más tiempo, ni los granos se nos van a pasar, ya que llega un momento en que no pueden absorber más humedad. Con un tenedor, soltar los granos (que se desprenderán fácilmente) y servir. Este arroz se puede guardar en el frigorífico y servir frío o caliente (un minuto en el microondas bastará).