Ingredientes:
- Coliflor.
- Guisantes frescos.
- Lechuga (mejor iceberg, trocadero, romana o alguna de hoja grande).
- Pimiento amarillo.
- Cebolla tierna.
- Zanahoria.
- Bulbo de hinojo.
- Tomate raf.
- Aceite de pimentón.
- Sal.
- Ajo en polvo.
- AOVE (aceite de oliva virgen extra).
- Perejil fresco picado.
Pasos:
- Partir y lavar la coliflor dejando floretes muy pequeños.
- Poner los floretes en un bol, salarlos y rociarlos con aceite de pimentón (sino tienes este aceite, espolvorea pimentón y riega con AOVE). Mezclar bien para que toda la coliflor quede untada con el aceite y dejar reposar mientras seguimos haciendo la ensalada.
- Colocar en el fondo del plato 2 ó 3 hojas grandes de lechuga, de manera que formen como un cuenco donde se recogerán el resto de ingredientes.
- Cortar el pimiento, la cebolla, el hinojo y la zanahoria en juliana y el tomate en dados, colocándolos sobre las hojas de lechuga. Salar y poner ajo en polvo.
- Añadir los floretes de coliflor empapados en aceite de pimentón.
- Desgranar los guisantes y ponerlos sobre todo lo demás. Salar y poner un poquito de AOVE (poco que la coliflor ya lleva el suyo).
- Espolvorear con perejil (o cebollino o cilantro o cualquier otra hierba fresca picada).
Nota: Cuando uno está a dieta tiene que ingeniárselas para que las muchas ensaladas que come no le resulten aburridas. Esta me pareció interesante contarla ya que lo de poner la lechuga en plan recipiente y la mezcla de sabor entre la coliflor cruda aliñada con el aceite de pimentón y los guisante tiernos y dulces me sedujo. Espero que os guste.