Comentario previo:
La mezcla de sabores y aromas que sugería este plato me atrajo desde el mismo momento en que lo leí en el blog Cocina con Ana. No es normal ver juntos en el mismo plato al hinojo, la naranja, las aceitunas y los garbanzos. Eso ya era motivo suficiente para despertar mi atención. Pero si, además, se le combinan los sabores de esos ingredientes con los aromas de las semillas de cilantro y el comino, más el toque picante de la pimienta y la cayena, pues no había otro remedio: esta receta había que probarla.
El caso es que se trata de una receta sencilla y rápida de ejecutar (si tienes los garbanzos ya cocidos o tiras de los que son de bote). La sencillez para nada es enemiga del buen sabor y cada día lo compruebo más. Eso sí, sigo buscando mezclas de sabores y cada día estoy más "pijicas" con las cosas de comer. Quizá es una de las malas (o buenas, según se mire) consecuencias de andar metido en esto del mundo "gastroblogueril". Pero espero que se me perdone ya que no tiene otra intención que la de comer bien y eso siempre es premiable.
El resultado final es un plato que puede servir de entrante potente o principal ligero, que puede ser acompañado por una ensalada de hojas y tomate, de brotes o similar y podría valer casi de plato único. ¿Qué le falta algo de cereal para ser alimento completo? Pues se come con un buen pan y asunto solucionado. Lo que no hay duda es que se trata de una elaboración que presenta una explosión de sabores y aromas que no dejará indiferente.
El caso es que se trata de una receta sencilla y rápida de ejecutar (si tienes los garbanzos ya cocidos o tiras de los que son de bote). La sencillez para nada es enemiga del buen sabor y cada día lo compruebo más. Eso sí, sigo buscando mezclas de sabores y cada día estoy más "pijicas" con las cosas de comer. Quizá es una de las malas (o buenas, según se mire) consecuencias de andar metido en esto del mundo "gastroblogueril". Pero espero que se me perdone ya que no tiene otra intención que la de comer bien y eso siempre es premiable.
El resultado final es un plato que puede servir de entrante potente o principal ligero, que puede ser acompañado por una ensalada de hojas y tomate, de brotes o similar y podría valer casi de plato único. ¿Qué le falta algo de cereal para ser alimento completo? Pues se come con un buen pan y asunto solucionado. Lo que no hay duda es que se trata de una elaboración que presenta una explosión de sabores y aromas que no dejará indiferente.
Ingredientes (para 2 raciones):
- 200 g. de garbanzos cocidos.
- 1 bulbo de hinojo ecológico de Freshvana (200 g.)
- 2 naranjas ecológicas de Freshvana.
- 18 aceitunas negras cacereñas, sin hueso.
- 10 semillas de cilantro machacadas.
- 1/2 c/c (cucharita de café) de comino en polvo.
- 1/4 c/c de cayena molida.
- Pimienta negra molida.
- Sal marina.
- 3 c/s (cuchara sopera) de AOVE (aceite de oliva virgen extra).
Pasos:
- Lavar y cortar en rodajas finas el hinojo. Saltearlo en una sartén caliente con el AOVE hasta que vemos que comienza a tomar color y queda blandito.
- Añadir los garbanzos cocidos, salar y aliñar con la hierbas y especias. Saltear durante unos minutos, a fuego suave.
- Mientras tanto, pelar y cortar en rodajas anchas la naranja. Pasar por una plancha o sartén caliente hasta que queden caramelizadas las dos caras.
- Antes de sacar los garbanzos y el hinojo de la sartén, añadir las aceitunas y dar un último salteado, para que suelten un poco de su jugo y se mezcle.
- Servir junto con las rodajas de naranja caramelizadas.
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