Pues ahora se han convertido en esto, en mermelada:
Ingredientes:
- Pimientos.
- Azúcar.
- Vinagre de Jerez.
Cómo hacerlo:
He hecho por separado los pimientos de cada color para que tuvieran un toque diferente, aunque el procedimiento es el mismo.
Mermelada de pimientos amarillos:
En un cazo poner la misma cantidad (mismo peso) de pimiento, limpio y troceado, y de azúcar, junto con la mitad del peso de vinagre. Cocer (dando vueltas de vez en cuando) durante una media hora. Colar los pimientos, triturar con batidora y envasar en tarro limpio esterilizado (5 minutos a máxima potencia en el microondas. Queda con un toque ácido, del vinagre.
Mermelada de pimientos rojos:
Proceder igual que antes, pero variar la cantidad de azúcar: poner vez y media del peso del pimiento limpio y troceado. Quedará más dulce.
Mermelada picante de pimientos verdes:
Proceder igual que con los pimientos amarillos, pero añadir 5 ó 6 pimientas de cayena (para que tenga un toque picante). Al triturar, podemos quitar todas las guindillas (quedará un picante muy suave) o podemos dejar mayor o menor número de ellas (según queramos la intensidad de picante).
Reducción del caldo:
El caldo sobrante (azúcar y vinagre) no lo tiraremos. Lo dejamos cocer, para que reduzca a nuestro gusto, y tendremos una salsa agridulce fenomenal. Yo lo dejé hasta obtener una textura de miel.